Cerca de 7 meses duraron los investigadores de la Sijin de la Policía, apoyados por la Secretaría de Seguridad, Convivencia y Justicia, siguiendo a los distintos miembros de ‘La octava’, una peligrosa estructura delincuencial acusada de haber realizado varias estafas a ciudadanos.
El modo de operar de los pandilleros consistía en que se hacían pasar por integrantes de la fuerza pública y mediante engaños e intimidaciones ofrecían préstamos, compra de cesantías y supuestas asesorías legales, que terminaban en estafas.
La peligrosa banda estaba compuesta seis personas: cinco hombres y una mujer, y según informaciones obtenidas por los uniformados estarían implicados en por lo menos tres homicidios derivados de su accionar delictivo.
En atención al #PlanChoque#ElQueLaHaceLaPaga, en coordinación con UNIPOL, se logró la desarticulación de una estructura criminal denominada ‘La Octava’, dedicada a la estafa. #SeguridadConLegalidadpic.twitter.com/UZTTA1r3pq
— Policía Metropolitana Bogotá (@PoliciaBogota) February 11, 2019
Las autoridades lograron desvertebrar esta banda criminal se tras 8 diligencias de allanamientos simultáneos en diferentes puntos de la ciudad, donde fueron halladas dos pistolas con sus respectivos proveedores y munición en poder del cabecilla, conocido como alias “Tegue”.
Así mismo se estableció que la banda operaba con una empresa fachada donde se dedicaban al trámite fraudulento de armas legales e ilegales por lo que frecuentemente protagonizaban enfrentamientos violentos, incluso entre ellos mismos, principalmente por ajustes de cuentas derivados de hechos delictivos que habrían cometido en meses anteriores.
Unos de los hechos violentos que protagonizaron quedó registrado en una cámara donde se ve cómo trata de evadir a la Policía, arrojando un arma blanca al suelo y ocultando al parecer un arma de fuego, dentro de una maleta, la cual, para dicho evento fue sacada del lugar de los hechos por parte de la mujer capturada.
En este hecho resultaron dos personas lesionadas. Los investigadores cuentan con los testimonios de algunos de los ciudadanos a quienes estafaron bajo esta modalidad y hacen un llamado a quienes los puedan reconocer, para que también los denuncien.
Las interceptaciones telefónicas y los seguimientos a cada uno de los integrantes de esta peligrosa banda señalan que podrían estar inmersos en temas de microtráfico y además sirvieron como prueba adicional para que, en la audiencia, un juez legalizara su captura, por los delitos de tráfico de armas, homicidio y concierto para delinquir.