Según el experto Santiago Dodero, director del Instituto de la Empresa Familiar de Aden Business School, el gran desafío al que se enfrentan las empresas familiares es evitar el naufragio una vez los hijos del fundador se vinculan a la empresa. Según estadísticas, una vez fallecen los padres fundadores de la empresa, cerca del 70% de las empresas familiares desaparecen.
Hay quienes dicen que las empresas familiares las fundan los padres, las acaban los hijos y las venden los nietos. Y es que uno de los retos más difíciles para las empresas familiares es evitar su desaparición con el cambio generacional.
Dentro de los consejos que comparte Dodero están:
- Aprender a comunicarse: Hay que crear herramientas de comunicación y manejo de conflictos, definir cuáles son los roles laborales para cada miembro de la familia. Es más complejo trabajar con familiares, si una persona externa no cumple se despide, pero a un hijo no lo puede despedir porque empiezan los problemas familiares.
- Hay que pasar por un proceso de selección: Se deben tener claras las fortalezas y debilidades de los hijos al momento de entrar a la compañía. “Es que no sabe que no sabe, pero se comporta como si lo supiera me dijo una vez un empresario acerca de su hijo”, señaló Dodero.
- Entre familiares se deben exigir: Una situación es que entre hermanos se dicen: “no te metas en lo mío que yo no me meto en lo tuyo, así vamos a andar bien. Entonces no hay un proceso de mejora y así la empresa se va a perjudicar y resultan todos los miembros de la familia peleados porque la compañía fracasa”.
- Conserve su familia unida: El desafío es que no sólo la empresa trascienda, sino que también la familia permanezca unida.
- Abordar temas tabú: Para que exista un gobierno corporativo que permita el crecimiento y la rentabilidad de la empresa hace falta el trabajo en equipo donde se puedan abordar temas tabú, temas que no se tratan para evitar conflictos y por no abordarlos explotan más adelante.
“Los hijos terminan la universidad y lo primero que quieren hacer son cambios y aplicar lo que aprendieron. Pero lo hacen criticando la forma como lo ha hecho su padre, diciendo que es obsoleto, anticuado y que ya no funciona”, explica Dodero. De esta forma, la alegría inicial que tuvo el padre frente a que su hijo se interese por su empresa, desaparece.
A la pregunta: ¿Qué recomendación le hace a una persona que quiera crear una empresa, que sea familiar o busque otros socios?, Dodero contesta: “Que sea familiar pero que busque dos generaciones distintas. Con esto, tiene dos visiones distintas que si se saben aprovechar pueden aportar mucho a la compañía”.