La descarbonización de la movilidad en Bogotá es un reto de grandes dimensiones. A pesar de los avances registrados en procesos como la flota eléctrica de TransMilenio, la promoción de la bicicleta, entre otras medidas; la búsqueda de este propósito tiene mucho más alcance y, detrás de cada acción, hay un trabajo intenso de articulación y organización para lograr objetivos muy estratégicos; el más ambicioso: una flota de transporte público cero emisiones para el año 2050 operando en la capital de Colombia.
Frente a estos progresos que consolidan la visión de una Nueva Movilidad limpia, amigable con el aire que respiran los bogotanos, el Portal Bogotá hizo varias preguntas al equipo de la Secretaría Distrital de Movilidad en cuyas respuestas se evidencian los logros que el Gobierno Distrital y sus entidades han logrado llevar a buen término:
Portal Bogotá: ¿Qué datos de la Secretaría de Movilidad pueden revelar los progresos de Bogotá en materia de descarbonización?
Secretaría Distrital de Movilidad:
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• Incremento en la adquisición de vehículos matriculados eléctricos e híbridos (2.342 vehículos eléctricos y 2.601 vehículos híbridos - corte febrero de 2021).
• Incremento de la flota de buses eléctricos (483 buses operando de los 1.485 buses adjudicados).
• Ya hay vehículos eléctricos en la flota de taxis (39 taxis eléctricos)
• Número de vehículos de la flota oficial de cero y bajas emisiones (Propios: 6 vehículos eléctricos y un vehículo híbrido, Contratados: 10 vehículos híbridos).
• Desarrollo de proyectos piloto como: triciclos eléctricos de última milla, vehículos operativos para la policía, triciclos de recolección de la UAESP.
PB: ¿Cuál es la relevancia de la Política Pública de la Bicicleta en la descarbonización?
SDM: La Política Pública de la Bicicleta (PPB) complementa la descarbonización de la ciudad y el desarrollo de la movilidad sostenible, a través de la puesta en marcha de bienes y servicios que buscan mejorar las condiciones físicas, socioeconómicas y culturales de la ciudad para el uso y disfrute de la bicicleta, como el modo de transporte que satisface las necesidades de movilidad de la ciudadanía sin comprometer o deteriorar el derecho a un ambiente sano.
PB: ¿Qué se ha propuesto la ciudad con el Plan de Acción Climática?
SDM: El Plan de Acción Climática de Bogotá define como metas la reducción del 50% en la emisión de Gases de Efecto Invernadero de Bogotá para 2030 y lograr la “carbono neutralidad” en 2050. Para alcanzarla se requiere el cumplimiento de cuatro metas fundamentales: promover un desarrollo orientado al transporte sostenible, el cambio modal a modos más sostenibles, la mejora de tecnologías y combustibles utilizados y realizar una gestión del transporte de carga.
PB: Hay dos compromisos adquiridos por la Administración en el grupo C40 Cities Climate Leadership Group, ¿a qué se refieren?
SDM: Son las declaraciones de “Calles libres de combustibles fósiles” y “Ciudades por un aire limpio”, a las que se han adherido más de 35 ciudades a nivel mundial, están alineadas con la prioridad que la ciudad le otorga a una reactivación económica sana, saludable, verde y limpia.
En la primera, se busca incrementar la adquisición de buses cero emisiones a partir de 2025 y la transformación de al menos una zona estratégica de Bogotá como una "Zona Cero Emisiones" para 2030; en los buses ya tenemos una avance importante. Se espera aumentar el volumen de peatones, ciclistas y usuarios de transporte público y compartido; reducir el número de vehículos en las calles; desarrollar políticas de planeación urbana que incluyan estos temas y tengan en cuenta a la ciudadanía y también fomentar una flota de la ciudad que sea cero emisiones,
En el marco de la declaración "Ciudades por un aire limpio” se adoptó el Plan de Gestión Integral de la Calidad del Aire de Bogotá 2030, cuyo principal objetivo será dar cumplimiento a las metas nacionales alineadas con la OMS con políticas y programas proyectados para 2025.
PB: ¿Que le aporta a todo esto el Proyecto de Acuerdo 127 para el impulso de la movilidad sostenible que se aprobó en el Concejo?
SDM: La ciudad ya había definido compromisos ambiciosos en materia de renovación, sin embargo, el proyecto de acuerdo recién aprobado en el Concejo establece metas aún más ambiciosas y específicas que las consignadas en la Declaratoria de C40:
• El Distrito Capital no podrá dar apertura a procesos de contratación de transporte público cuya base de movilidad esté soportada en el uso de combustibles fósiles a partir del 2022, de transporte oficial de pasajeros a partir del 2023 y los buses nuevos para el transporte de pasajeros y las demás tipologías vehiculares cuyo fin sean las funciones de campo a partir del 2027
• La flota oficial del Distrito para transporte de pasajeros será 100% eléctrica a partir del 2030.
• En el 2022, se deberán establecer los lineamientos para promover la implementación de un esquema de responsabilidad extendida del productor y/o comercializador en la corriente de Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEES) generadas por la flota eléctrica.
PB: ¿Qué es la Política Pública de Movilidad Motorizada de Cero y Bajas Emisiones y qué buscan con ella?
SDM: Esta tiene como objetivo consolidar la movilidad motorizada de cero y bajas emisiones como una alternativa sostenible, accesible, competitiva y atractiva en la ciudad región. En su formulación se busca establecer compromisos público-privados por la electromovilidad para buscar acceso a créditos, tasas diferenciales y/o seguros a menores costos; generar una mayor oferta en todos los segmentos (taxi, flota oficial, privado), crear un cluster de innovación y desarrollo, generar modelos de negocio alternativos, impulsar la creación de empleos de movilidad eléctrica, ampliar la red de Infraestructura de acceso público, promover descuentos para cargadores en casa, entre otros.
Trabajamos en el desarrollo de esquemas de incentivos y desincentivos económicos y no económicos; un modelo de economía circular de baterías eléctricas; un ecosistema entre el sector público, privado y académico de generación de información, investigación, desarrollo e innovación frente a la cadena de valor de las tecnologías de cero y bajas emisiones; una red de infraestructura de recarga inteligente y un entorno de comunicación, pedagogía y participación.
PB: ¿Qué incentivos o estímulos existen para descarbonizar otros sectores del transporte como los camiones, buses de servicio colectivo (transporte escolar), transporte público individual, motocicletas o vehículos particulares?
SDM: En incentivos tributarios, se destacan: aranceles del 0% para vehículos eléctricos y del 5% para vehículos híbridos, IVA del 5% para vehículos eléctricos e híbridos (comparado con un 19% para vehículos a gasolina), descuento en el SOAT del 10% para vehículos eléctricos e impuesto de propiedad/circulación equivalente al 1% del valor comercial para los vehículos eléctricos en comparación al 1,5%-3,5% para vehículos híbridos y a gasolina.
A nivel distrital, se generan descuentos en los impuestos de propiedad/circulación del 60% para vehículos particulares eléctricos, 70% para taxis eléctricos y 40% para vehículos híbridos durante 5 años. Los vehículos híbridos y eléctricos están sujetos a tasas verdes por parte de entidades bancarias que tienen créditos de hasta el 110%. En cuanto a incentivos no tributarios, los vehículos eléctricos están exentos de restricciones de circulación (pico y placa, día sin carro, etc.) y cuentan con parqueaderos preferenciales.
Se siguen evaluando nuevos incentivos desde el Distrito que permitan estimular aún más la descarbonización del transporte.
PB¿Existen otras estrategias de descarbonización desde Movilidad que no tengan que ver directamente con transporte motorizado?
SDM: Con respecto a diferentes estrategias de descarbonización que no tienen que ver con vehículos automotores, mediante el proyecto de Acuerdo 127 de 2021 se promueve el uso de patinetas y bicicletas compartidas, dado que esta iniciativa autoriza la Publicidad Exterior Visual en estos vehículos, facilitando su sostenibilidad financiera y la posibilidad de crear un sistema de alquiler.
También hay un incentivo de la movilidad de los peatones con cuatro estrategias de intervención que promueven la caminata como un modo alternativo que reemplace lo viajes realizados en vehículos mixtos contaminantes. Estas estrategias de trabajo se conocen como Andenes emergentes, Resignificación de vías peatonales, Cruces seguros y Barrios Vitales. Cada una de estas interviene la calzada o espacio público con elementos de señalización que buscan distribuir el espacio para generar mayor cantidad de área de circulación peatonal.
