La alcaldesa Claudia López ha sido elegida como uno de los personajes del año en el periódico El Espectador, uno de los principales diarios de circulación nacional. Según el rotativo, los dos principales activos de la mandataria de los bogotanos son su carácter y sus convicciones políticas: "López cuenta, en principio, con dos importantes activos: su carácter y sus convicciones políticas. Como alcaldesa ha demostrado que no se arruga ante las adversidades preexistentes ni sobrevinientes. Y ha probado que no solo en la izquierda y la derecha existen liderazgos vigorosos".
Una alcaldesa que confronta en nombre de la ciudadanía
Quien escribió el perfil de la funcionaria es Carlos Vicente de Roux, exconcejal y excandidato a la alcaldía de Bogotá. En el texto, el político destaca que el "ímpetu y fogosidad" de López han sido muy oportunos en momentos claves de la ciudad durante el año, tales como el inicio de la pandemia y las protestas que devinieron de las denuncias de abuso policíal tras la muerte del estudiante de derecho Javier Ordóñez en un CAI de la localidad de Engativá:
"Cuando la pandemia llegó a Colombia fue la primera figura pública que marcó un rumbo en la dirección correcta, enfrentando las vacilaciones del Gobierno nacional y decretando cuarentenas para aplanar la curva de los contagios y equipar debidamente al sistema de salud. En la mañana del 9 de octubre tuvo la entereza de llamar por su nombre a la masacre de nueve jóvenes de Bogotá y tres de Soacha ultimados a bala por agentes de los CAI, y de reclamar una reforma de la Policía", escribió de Roux haciendo un análisis crítico de las actuaciones de la alcaldesa en dichas crisis.
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Actitud crítica pero constructiva con el Gobierno Nacional
La alcaldesa de Bogotá ha sido contundente y franca a la hora de controvertir con el Gobierno Nacional, sus postura siempre ha sido afirmar que su labor no ha sido conformar un "comité de aplausos" sino exigir lo que como mandataria le corresponde para responder a la ciudadanía que espera una buena gestión de su parte. A pesar de las tensiones que se han exacerbado en algunos medios, especialmente en redes sociales, las relaciones entre Bogotá y la Nación siguen siendo constructivas y los mayores beneficiarios de esta condición son los ciudadanos y la naciente región metropolitana.
"El buen clima entre la nación y el Distrito da pie a creer que llegará a buen puerto el Acuerdo Social por Bogotá propuesto por la Alcaldía a la Presidencia para reunir $3,6 billones, con el fin de darles una renta básica a 900.000 hogares y proporcionar otros apoyos a sectores muy vulnerables, incluidas las mujeres vinculadas a la economía del cuidado", subraya De Roux en el artículo.
Un plan de desarrollo progresista con enfoque en inversión social
La administración al mando de Claudia López, además de ofrecer importantes luces para el país en materia de manejo de la pandemia por el coronavirus COVID-19, también ha puesto en la balanza la inversión social que se requerirá para sacar de la pobreza a millares de familias que, además de sufrir las consecuencias de la crisis económica, enfrentan especial vulnerabilidad. Para ella, esta situación sanitaria demostró la urgencia de invertir en beneficio de los más pobres y por eso la renta básica se convirtió en una prioridad dentro de su plan de desarrollo:
"Bogotá ha venido incrementando, a lo largo de los años, los medios con que cuenta para suministrar bienes básicos gratuitos, o reducirles su costo, a los hogares de los estratos bajos, comenzando por la salud y la educación. El Plan de Desarrollo, cuyo monto asciende a $109 billones, se propone aprovechar al máximo esa capacidad", destaco De Roux en el periódico.
Con aciertos y algunas equivocaciones reconocidas con humildad, Claudia López se ha convertido en una figura política importante para el país. Su imagen favorable se ha mantenido por encima del 70 % en las encuestas realizadas a lo largo del año y su compromiso se refleja en un trabajo incansable que registra a través de los medios oficiales del Distrito y de sus propias cuentas personales:
"Claudia no ha cumplido ni un año al frente de la ciudad. Por ese motivo su proyecto sigue siendo una promesa. Una promesa de trabajos y logros por construir una ciudad más equitativa y funcional. Puede cumplirla, porque es capaz, honrada, corajuda e infatigable (“voy a descansar en la otra vida, porque en esta ya no se alcanzó”, dijo hace poco). Y nosotros, los habitantes de Bogotá, necesitamos y merecemos que la cumpla".
