El área que se quemó en el Humedal Tibanica el pasado martes 18 de febrero equivale a nueve canchas del estadio El Campín. Se reportaron serios daños en la estructura vegetal y la pérdida de varios especímenes de fauna, según informe de Secretaría de Ambiente.
El humedal es uno de los pulmones verdes de la localidad de Bosa, en el sur de Bogotá.
“El Cuerpo de Bomberos de Bogotá respondió de manera rápida y apagaron el incendio. Tenemos reporte de tres animales muertos y por fortuna no hubo afectaciones humanas. La recuperación y restauración de este ecosistema será una labor ardua”, aseguró Carolina Urrutia, secretaria de Ambiente.
Una vez fue controlado el incendio y tras el difícil acceso al lugar, el grupo técnico de la Secretaría de Ambiente realizó el recorrido por el área afectada del humedal y determinó que las zonas centro y noroccidental fueron las más afectadas.
Entre las especies vegetales más afectadas se reporta la enea (Typha angustifolia), especie pantanosa y el junco o totora (Schenoplectys califirnicus), especie acuática.
El Cuerpo Oficial de Bomberos de Bogotá adelanta la investigación para determinar las causas y el origen del incendio.
Labores de diagnóstico y recuperación del humedal
La Secretaría de Ambiente inició el diagnóstico para determinar el daño ambiental que este incendio provocó en el ecosistema y así continuar con los trabajos de restauración que pueden tardar varios años.
Las autoridades continuaron con la extinción total de los focos o puntos calientes que puedan generar una nueva emergencia. Además, la Secretaría se encuentra analizando distintas alternativas para la recuperación del humedal.
El Distrito adelantará espacios de participación ciudadana para escuchar las propuestas e iniciativas de las comunidades aledañas para prevenir futuros incidentes en estos ecosistemas.
“Hacemos un llamado a la comunidad para que reporten cualquier actividad irregular o extraña alrededor de nuestros humedales y a que juntos los protejamos. Estos ecosistemas son parte de nuestra estructura ecológica principal y nos proveen servicios ambientales. Agradeceremos cualquier información sobre ese o cualquier suceso que ocurra en nuestros humedales”, concluyó Urrutia.
El costo de atender un incendio forestal e iniciar su proceso de restauración es elevado, sin contemplar el valor del mantenimiento y la pérdida de biodiversidad, por lo que resulta conveniente que la ciudadanía se apropie activamente para evitar estas emergencias.
La Secretaría de Ambiente hace un llamado a todos los ciudadanos para que estén alertas a hechos que puedan poner en peligro los ecosistemas y en caso de emergencia por incendio forestal lo reporten a la Línea 123.