Este jueves 14 de marzo, cuando se celebra el día mundial del riñón, el Distrito, a través de la Subred Integrada de Servicios de Salud Sur Occidente continúa fortaleciendo su trabajo de prevención en la población infantil para que todos los niños en Bogotá puedan tener una buena salud renal.
En Bogotá, en promedio, el 6 % de la población pediátrica presenta hipertensión; entre un 8 y 10% infecciones urinarias y el 8% anormalidades en las vías urinarias. Frente a los pacientes que ingresan a la unidad de recién nacidos, entre un 8 y 12% presenta algún grado de lesión renal aguda, razón por la cual la Secretaría de Salud cuenta con el servicio de Nefrología pediátrica en cada una de las cuatro Subredes Integradas de Servicios de Salud.
Para el caso de la Subred Sur Occidente, la Unidad de Servicios de Salud Patio Bonito Tintal, los servicios de cuidado intensivo pediátrico, neonatal y de nefrología pediátrica en el programa canguro del hospital Occidente de Kennedy, registran un promedio de 80 consultas mensuales y 800 intervenciones en lo corrido de los dos últimos años, correspondientes a valoraciones y manejos hospitalarios, lo que la convierte en un referente en la red pública hospitalaria de Bogotá, en la prestación de estos servicios.
La enfermedad renal es silenciosa por lo cual hay que estar atentos a cualquier síntoma que presenten los niños, debido a que un descuido en los cuidados del paciente puede terminar con una falla completa del órgano, requiriendo de tratamientos como diálisis o un trasplante renal, explicó Juan Guillermo Cárdenas Aguilera, Nefrólogo Pediatra Subred Sur Occidente.
7 Reglas de oro que debemos tener presente para el cuidado de los riñones:
• No auto-medicarse
• Controlar el nivel de azúcar en la sangre
• Beber abundante agua
• Practicar ejercicio de manera habitual
• No fumar y evitar hacerlo cerca de los niños
• Monitorear la presión sanguínea
• Comer saludable, disminuir el consumo de sal y controlar el peso.
El trabajo en conjunto con el servicio de la Unidad Renal del hospital Occidente de Kennedy, han planteado el esfuerzo para la habilitación y el inicio de terapias de reemplazo renal crónicas, hemodiálisis y diálisis peritoneal.
En colaboración con la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos se ha logrado administrar terapias de remplazo renal tanto diálisis peritoneal, así como terapias de remplazo renal lentas continuas, aspirando a disminuir el impacto de las enfermedades renales con la atención oportuna y adecuada.
Realizando una atención inmediata se logra que el niño tenga una buena calidad de vida, si vemos que hay la posibilidad de manejar a un paciente con dietas o con manejo terapéutico, fármacos, podemos prolongar la vida del órgano y por ende del paciente y así evitar que llegue a una diálisis, agrega el doctor Cárdenas.
La Nefrología Pediátrica es la subespecialidad de la pediatría que diagnostica y maneja los desórdenes que afectan el riñón y las vías urinarias, incluyendo falta del riñón, tensión arterial alta, enfermedades heredadas del riñón, cálculos renales, infecciones urinarias y anormalidades en la orina, tal como sangre o perdida de proteínas.
Dentro de los síntomas en una falla renal se destacan los trastornos de talla y alimentación, y otras enfermedades asociadas que pueden aumentar los síntomas, tales como dolores de cabeza, fiebre, deshidratación, pérdida de peso, anemia o trastorno en la formación de los huesos.
La ruta para la atención de un niño en el servicio de nefrología pediátrica es que sea remitido directamente por su pediatra, cuando este encuentre anomalías en los exámenes que debe realizar al menor o que esté presente alguna anormalidad ecográfica (el bebe que nace con un solo riñón, quistes o perdida de la anatomía de los riñones), o los pacientes que remite el urólogo cuando existen trastornos en la función urinaria.