Estructuras de drenaje, aljibes del siglo XIX y basureros que datan de los siglos XVI al XVIII son algunos de los hallazgos arqueológicos realizados durante la obra de peatonalización de la carrera Séptima, que avanza desde el lunes 25 de agosto entre la calle 10 y la Avenida Jiménez.
Los hallazgos se registran dentro del programa de Arqueología Preventiva del contratista que adelanta el proyecto, y está avalado por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH), con el acompañamiento del Instituto Distrital de Patrimonio Cultural.
Las labores del equipo de arqueología se enfocan en la identificación, registro y delimitación total de los yacimientos arqueológicos dando así cumplimiento a la legislación vigente en materia de manejo y recuperación del patrimonio cultural, especialmente en lo relacionado con la implementación de acciones de protección y prevención de impacto sobre el patrimonio arqueológico del centro histórico de la ciudad que no solo es importante para el distrito sino para la Nación.
Un primer elemento arquitectónico identificado en el costado oriental, muy cerca de la esquina de la calle 13, es un posible muro y cañuela del siglo XIX. Junto con esta estructura se encontraron fragmentos de cerámica indígena e hispánica de los siglos XVI y XVII, además de fragmentos de huesos de bovinos, vidrio y fragmentos de metal.
Frente al edificio Manuel Murillo Toro, se identificó también un piso asociado posiblemente a una estación del tranvía.
En el costado occidental de la séptima, en cercanías a una importante papelería del sector, se encontró una cañería para la conducción de agua, Siglo XIX.
Además se identificó un basurero, utilizado al parecer, entre los siglos XVI y XIX, compuesto por fragmentos de cerámica, vidrio, metal, huesos de animales y semillas.
Piso asociado a estación del tranvía - Cañería para la conducción de agua en el siglo XIX
De acuerdo con los arqueólogos, la preservación de restos óseos es excelente y está compuesta mayoritariamente de restos de bovino, cabra, cerdo y bagre. Los restos presentan huellas de haber sido cortados por lo que pueden aportar información sobre dieta, comercio y maneras de preparar los alimentos durante el periodo Colonial.
Los estudios arqueológicos permitirán ver toda la secuencia de ocupación de la carrera séptima desde el siglo XVI hasta mediados del siglo XX y la posibilidad de ampliar las hipótesis establecidas del uso del espacio público y privado en esas épocas.