El año 2021 fue clave para la reactivación de la estrategia de Calles Mágicas y su enfoque hacia intervenciones más lúdicas, más coloridas, más estimulantes, y sobre todo más colectivas y participativas.
¿Qué son las Calles Mágicas?
Esta estrategia distrital consiste en habilitar calles peatonales o espacios de uso público para que los niños y niñas, en compañía de sus padres, acudientes o acompañantes, tengan un espacio de esparcimiento en el que disfruten de varios juegos concertados entre la comunidad y el Distrito.
Este año, la reducción paulatina de las restricciones por el COVID-19 permitió que se intervinieran 74 Calles Mágicas en 13 localidades de Bogotá; 64 de estas se hicieron durante el segundo semestre del 2021, la gran mayoría (41) durante los dos festivales de Calles Mágicas que se llevaron a cabo en los meses de septiembre y octubre. Estos festivales permitieron reposicionar la estrategia en las esferas distritales, locales y barriales, y lograron que se diera una participación multigeneracional y multipoblacional de más de 1.000 ciudadanas y ciudadanos.
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Con el liderazgo de la Secretaría de Hábitat, en estas calles se exploraron nuevos diseños de juegos que dialogaran con el contexto histórico y/o ambiental de la ciudad y que fueran llamativos para los niños, niñas y jóvenes, pero que también fueran juegos que pudieran ser usados por poblaciones de otras edades y que generaran un intercambio generacional, como es el caso de las pizarras de tiza. Varias de las intervenciones que contemplaban juegos se hicieron en las inmediaciones de los colegios del distrito, ya fuera en las plazoletas externas o en canchas o corredores dentro de las instituciones educativas.
Cambios enmarcados en participación y color
Para estos casos se realizaron, previo a la intervención, talleres de tiza con la comunidad académica para determinar cuáles serían los diseños de los juegos que se pintarían. De las más de 1.000 personas que participaron en la pintada de las calles durante el 2021, 370 hacían parte de la comunidad educativa.
Los diseños de las intervenciones propuestas buscaron ser lúdicos para con la comunidad, brindándole información sobre lo que rodeaba el espacio intervenido, o generando mensajes de concientización sobre problemáticas o necesidades que aquejaran a la comunidad y que requirieran ser abordadas. Así, la participación de la comunidad tanto en el momento de pintar las calles, como en la concertación y/o co-diseño de las intervenciones permitieron que estas abordaran o reflexionaran sobre problemáticas que se presentaran en el barrio y que, por medio de la pintura., se pudieran generar mensajes o diseños que promovieran un fortalecimiento del tejido barrial.
