Nueve compañías fueron seleccionadas como finalistas del Desafío de Ciudades Climáticamente Inteligentes que premia a las más innovadoras soluciones de tecnología limpia para llevarlas a cabo en Bogotá. Durante los próximos cuatro meses, los finalistas trabajarán para perfeccionar las soluciones y adaptarlas al contexto de la capital colombiana.
De estos proyectos, que abordarán retos específicos como la movilidad del transporte de mercancías y la vivienda asequible, se hará una segunda selección las cuales se ejecutarán en conjunto con la Administración Distrital.
Esta es una competición global organizada por ONU-Hábitat y Ciudades viables -programa sueco de innovación estratégica para la transición a ciudades climáticamente neutras y sostenibles-.
"Es crucial replantearse la forma en que diseñamos, gestionamos y planificamos nuestras ciudades, para que puedan funcionar de forma que contribuyan a cumplir el objetivo de un mundo sin emisiones de carbono. El Desafío de Ciudades Climáticamente Inteligentes proporciona una plataforma para la colaboración y la co-creación, para encontrar soluciones innovadoras que contribuyan a un mejor futuro urbano", resaltó la Directora Ejecutiva de ONU-Hábitat, Maimunah Mohd Sharif.
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"Las ciudades y las comunidades son fundamentales para lograr la necesaria transición climática, por lo que iniciativas como el Desafío de Ciudades Climáticamente Inteligentes son importantes para contribuir a la neutralidad climática y a la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero a través de soluciones innovadoras", dijo Darja Isaksson, Directora General de Vinnova, la Agencia de Innovación de Suecia.
En junio de 2022, se anunciarán hasta cuatro equipos ganadores en el Foro Urbano Mundial de Katowice, Polonia. Los equipos ganadores se repartirán hasta 400.000 euros en una fase de planificación para construir hacia la demostración de sus soluciones en las ciudades en 2023, con el objetivo final de crear soluciones que creen mejores futuros en las ciudades de todo el mundo.
Los equipos ganadores del Desafío de Ciudades Climáticamente Inteligentes trabajarán con ciudades, inversores y otros socios para demostrar nuevas vías y capacidades para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo al mismo tiempo a la restauración de la naturaleza, la justicia social, la salud, la seguridad, el empleo y otros beneficios sociales.
