Las plazas distritales de mercado se encuentran priorizadas como lugares estratégicos que reúnen tradiciones locales y departamentales, que refuerzan la identidad y pertenencia de una ciudad que se ha convertido el hogar de millones de personas que provienen de diferentes partes del país. En estos centros se hayan los más profundos arraigos de la economía popular, con una mezcla de saberes ancestrales que han catapultado a las plazas como lugares icónicos dentro de la ruta turística de Bogotá.
La pandemia y la emergencia sanitaria ha afectado directamente la economía de Bogotá, por eso el Distrito a través Instituto Para Economía Social - IPES tiene el compromiso de potenciar seis plazas para el turismo con una estrategia de reactivación compuesta por cuatro pilares que va permitir incentivar la visita de familias, grupos de amigos, extranjeros y demás. El fortalecimiento de la marca, las plazas como generadores de ingresos, las plazas como parte de una ruta turística y las plazas como un espacio de encuentro ciudadano para el tejido social.
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Marca 'Plazas Distritales de Mercado'
Calidad, variedad, servicio, colores, frutas, sabores, entre otros, se plantean como lo que identifica a las plazas de mercado, potenciar la marca significa entonces que los bogotanos identifiquen las Plazas distritales como escenarios de esparcimiento, abastecimiento y aprendizaje, donde puedan reencontrarse con la gente luego de este largo proceso de aislamiento en que nos puso la pandemia y de cara a la reactivación económica.
Llevar la marca de las plazas a otro nivel implica también encontrar un identificador para cada Plaza Turística que permita establecer y diseñar servicios que llamen la atención de los visitantes, focalizar las fortalezas de cada una, por ejemplo, en su gastronomía, en su historia o en las artesanías permitirá ampliar la oferta para todos, generar nuevos emprendimientos y potenciar los ya existentes.
Las plazas referentes y sus diferenciaciones
1. Plaza La Concordia: Historia
La plaza de la concordia tiene ese elemento que conjuga la historia con las personas y a su vez renueva para su público la forma en la cual contar su línea de tiempo, marcada por momentos trascendentales para la ciudad desde su fundación hasta la actualidad, siendo un escenario para aprender y sentirse más cercano con lo que ha sido tradicionalmente la localidad de la candelaria.
A continuación, la plaza La Concordia ubicada en pleno corazón del centro de Bogotá
La plaza, además, cuenta con un amplio espacio público alrededor, incluyendo una terraza con vista panorámica, la cual crea un potencial turístico muy atractivo. En su espalda, se encuentran los cerros de Bogotá, ofreciendo así, una estrecha zona verde y una conexión directa con el campo, para visitantes y habitantes del centro de la capital.
2. Plaza La Perseverancia: Gastronomía
La plaza de la Perseverancia donde todo se conjuga, por esto la apuesta del IPES es potenciar la oferta no solo en esta sino a lo largo del sistema distrital de plazas de mercado y llevar la gastronomía al siguiente nivel que permita posicionar aún más a Bogotá como un destino gastronómico líder en Latinoamérica.
3. Plaza Samper Mendoza: Hierbas
En la plaza Samper Mendoza, los visitantes encontrarán un espacio único en el país que permite llamar la atención de locales y turistas como un escenario diferente que invita a percibir los saberes con todos los sentidos.
A continuación, la plaza Samper Mendoza ubicada en el occidente de Bogotá
4. Plaza 12 de octubre: Artesanías
A través de las artesanías las plazas de mercado unifican el saber de la gente con el de los lugares, y es de gran importancia ser una vitrina no solo de la cultura bogotana sino de cualquier región del país, permitirle al visitante acercarse un poco más a los territorios a través de estos productos que en ocasiones marcan el recuerdo de haber vivido una experiencia única en determinado lugar.
5.Plaza Fontibón: Ancestralidad
Fontibón ha sido para la ciudad una de las localidades más cercanas a las culturas indígenas aun vivas en la ciudad, y aunque claramente ha sido permeada por la urbanización y la modernidad el arraigo del territorio a través de las memorias ancestrales es latente por parte de quienes aún habitan aquí, por eso es importante que este elemento sea rescatado y expuesto para que todos los que aun ignoran las raíces distintas a las españolas como tradicionalmente nos han enseñado se puedan sentir cercanos, y podamos generar espacios de aprendizaje para todos a través de la labor de la plaza de mercado.
6.Plaza 20 de julio: Ruralidad
El sentir religioso es vital para la plaza del 20 de julio, no en vano es vecina de uno de los templos católicos más importantes y reconocidos en la ciudad, por esto en parte decir que el elemento que diferencia la plaza es la religión es impreciso, es más bien el hilo conductor de quienes habitan y visitan la plaza, pero aquí es donde el concepto de ruralidad también cobra mucha fuerza, los mercados campesinos son quizás los vestigios históricos por denominación más importantes en la dinámica de plazas de mercado.
A continuación, el centro de Innovación Gastronómico en la plaza Doce de Octubre ubicada en oriente de Bogotá
7.Plaza 7 de agosto: Frutas
Cuando un extranjero piensa en Latinoamérica asocia de inmediato las frutas y el verde como eso que no se puede perder en su visita. En el ejercicio de turismo asociado a las plazas de mercado conocemos que las frutas han sido el motivador para que probarlas sea el plan imperdible, por esto la plaza del 7 de agosto se impone con sus montañas de frutas y verduras, colores, aromas y sabores que llaman la atención de todos los que visitan este espacio.
El Fondo Nacional de Turismo- Fontur visita la Plaza Distrital de Mercado la Concordia, participante a la recertificación del sello de calidad colombiano NTS para el Área Turística Sostenible de La Candelaria como Punto de Interés Turístico Gastronómico y Cultural de Bogotá. pic.twitter.com/3CZ9soaX95
— IPES (@IPESBogota) August 22, 2021
Para 2020, el flujo medio de visitantes de las plazas de mercado definidas por el IPES como de potencial turístico, ascendió a 355.464 personas uno de los retos será aumentar no solo el número medio de visitantes sino los ingresos de los locatarios, así como de las plazas como unidades de negocio pensando en la sostenibilidad financiera que deben tener estos espacios a futuro
