“Que el afán no destruya los sueños”, es el nombre de la nueva campaña que busca concieciar a los bogotanos sobre los riesgos de conducir con exceso de velocidad.
Con el apoyo de la Iniciativa Bloomberg para la Seguridad Vial Global, la administración del alcalde Enrique Peñalosa lanzó hoy la campaña desarrollada como parte del Programa de Gestión de la Velocidad de la Política de Seguridad Vial del Distrito, Visión Cero, que establece que “ninguna muerte en el tránsito es aceptable, todas son evitables”.
La velocidad es considerada como el principal factor determinante en la gravedad de un siniestro vial. Así lo señalan estudios de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y del Instituto de Recursos Mundiales (WRI). Los peatones, por ejemplo, tienen 80% de probabilidades de resultar muertos por el atropellamiento de un vehículo que circule a una velocidad de 50 km/h.
“El exceso de velocidad es una de las principales causas de los siniestros de tránsito graves. Es nuestra premisa que los ciudadanos no pierdan la vida en las calles por movilizarse; es crítico que cada 2 días en Bogotá se registren 3 muertos, debemos cambiar esta tendencia. La apuesta es gestionar velocidades seguras que protejan la vida de los más vulnerables, a través de cambios en la infraestructura, controles efectivos y educación”, afirmó el secretario de movilidad, Juan Pablo Bocarejo.
Además, afirmó que atropellar a un peatón es como empujarlo desde un edificio. A medida que se incrementa la velocidad, se hace más grave el siniestro, debido a la vulnerabilidad del cuerpo humano ante estos impactos.
Como parte del Programa de Gestión de la Velocidad, recientemente la Alcaldía Peñalosa completó la entrega de la Zona número 2.000 en Ciudad Bolívar, en las inmediaciones del colegio Rufino José Cuervo, para la protección de los estudiantes, la comunidad escolar y los habitantes del entorno.
“En 2017 el 43% de los peatones muertos en siniestros viales fueron adultos mayores y 4% menores de edad, que sumados representan cerca de la mitad de las víctimas peatones que murieron en 2017. Debemos trabajar porque todos los ciudadanos respeten los límites de velocidad.”, dijo Bocarejo.
El lanzamiento de esta campaña cuenta con el apoyo de la Policía de Tránsito que, en el marco del Programa de Gestión de la Velocidad, junto con la Secretaría de Movilidad, ejerce controles de velocidad en los principales corredores de la ciudad. Entre enero y julio de 2018, se han realizado 477 puestos de control de velocidad y se impusieron 8.069 comparendos.
Con esta nueva campaña, la Nueva Bogotá espera llegar a más ciudadanos e incidir en el cambio comportamental, para salvar vidas.
“El exceso de velocidad es el mayor factor de riesgo en sí mismo, y hace más graves otros comportamientos riesgosos como el consumo de alcohol, las distracciones, el casco mal usado, la violación del pare y del semáforo en rojo” afirma Darío Hidalgo, Director de transporte integrado del WRI Ross Center.
