La Secretaria de Integración Social, Xinia Navarro, reiteró que los comedores comunitarios no se van a cerrar, pero sí se van a transformar para ofrecer un mejor servicio como comedores comunitarios - cocinas populares. Todo en beneficio de la población pobre y vulnerable de Bogotá, centro de la estrategia que se adelanta y que hoy beneficia a treinta y dos mil personas.
“Vamos a mejorar la calidad y también la cobertura. El objetivo está puesto en que los participantes o beneficiarios reciban el mejor servicio, para el cual se implementarán las medidas de bioseguridad y enfrentar así la emergencia producida por la Covid 19”, manifestó la secretaria a través de diferentes canales y con la compañía del equipo de la Dirección de Nutrición y Abastecimiento mediante un Facebook Live que se emitió por las redes de Integración Social (https://fb.watch/3keqhmujjY/).
La transformación de servicios implicará una nueva convocatoria para quienes operarán en esta nueva etapa, en la que podrán participar los actuales operadores, así como también todas las organizaciones comunitarias que así lo consideren viable.
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“Por eso se hará una amplia convocatoria para que organizaciones campesinas, cooperativas, organizaciones de jóvenes, economía social y solidaria participen masivamente y se realice un concurso competitivo en donde ganen quienes mejores condiciones técnicas y comunitarias presenten para los servicios de la población pobre y vulnerable”, expresó Xinia Navarro.
“Los comedores comunitarios deben ser no sólo son un sitio de suministro de alimentos sino un espacio de construcción colectiva que va más allá de unas paredes, para trascender a un servicio que asegure la seguridad alimentaria de los usuarios pero también generar procesos para la movilidad social de ese usuario”, agregó la titular de la cartera social del distrito.
Así mismo la funcionaria enfatizó que la transformación permitirá cumplir las medidas de bioseguridad sin afectar a los usuarios, para lo cual habrá entrega de la comida caliente en la unidad operativa en recipiente hermético y a domicilio. NO habrá toma de alimentos en unidades operativas por cuanto hay un alto riesgo de contagio por la COVID 19.
“La reducción en gastos administrativos permitirá garantizar las nuevas modalidades de entrega y la posibilidad de ampliar coberturas y de esa manera optimizar el gasto de recursos públicos, que no pueden ser en elementos que impliquen presencialidad de los usuarios como mesas y sillas, entre otros. La nueva normalidad implica reinventarnos y esto es para todos los sectores, incluidos quienes operan los comedores comunitarios – cocinas populares”, aseguró Xinia Navarro.
Los comedores comunitarios – cocinas populares tendrán flexibilidad de horarios, atención de acuerdo con las poblaciones y edades, acompañamiento psicosocial y en procesos de emprendimiento y estudio para los participantes y enfoque de género dentro del marco del sistema distrital de cuidado.
Para el segundo semestre del 2021 la estrategia móvil permitirá llegar hasta zonas rurales y lugares de fronteras de barrios pobres y vulnerables.
