La Secretaría Distrital de Integración Social presentó una nueva modalidad de transferencias monetarias orientada a favorecer la autonomía y a contribuir a la seguridad alimentaria de las mujeres cabeza de hogar en Bogotá.
Esta nueva estrategia apunta a fortalecer la autonomía de los hogares con jefatura femenina y la desfeminización de la pobreza con los pagos de alimentos, salud y arriendo a través de las transferencias monetarias realizadas a las mujeres cabezas de hogar en Bogotá.
Carolina Cuervo, una mujer de 31 años dedicada al reciclaje, es una de las 500 mujeres cabezas de hogar que junto a sus núcleos familiares son beneficiadas de la nueva modalidad de Transferencias Monetarias, una estrategia implementada por la Secretaría Distrital de Integración Social para favorecer la autonomía y contribuir a la seguridad alimentaria de esta población.
Contenidos relacionados
Una contribución para la seguridad alimentaria
La subdirectora de Nutrición de Integración Social, Jacqueline Londoño explicó que esta modalidad surge como respuesta a la necesidad de fortalecer la autonomía de los hogares con jefatura femenina y la desfeminización de la pobreza, tras explicar que “ a través de un auxilio monetario contribuimos a la seguridad alimentaria para que ellas puedan comprar sus alimentos en el sitio que les quede más cómodo y en el horario que puedan ir a hacerlo, así también, que ese dinero lo puedan utilizar como un apoyo para su arriendo, servicios u otros gastos que pueda tener la familia”.
Precisó la funcionaria que desde la entidad se reconoce la importancia de incentivar el liderazgo femenino en los hogares donde se requieren generar nuevas habilidades y competencias para que las proveedoras de las familias sientan garantizado el cumplimiento de sus derechos fundamentales.
Carolina, madre cabeza de familia, que en la actualidad recibe una transferencia mensual gracias a esta nueva modalidad de oferta de servicios, describió con sus propias palabras la rutina diaria en las calles capitalinas y su jornada que inicia a la 1 de la tarde y termina a las 10 de la noche, separando los residuos que producen los hogares y que son depositados al frente de edificios y casas.
“Mi mamita recibía el bono canjeable que da la alcaldía a través de un programa de la Secretaría de Integración Social y con eso hacíamos mercado, sin embargo, mi madre murió hace 3 meses y desde ahí estoy recibiendo la transferencia monetaria mes a mes”, señala esta mujer recicladora de oficio.
En su relato, Carolina, expresa que el dinero recibido por la transferencia es de dedicación exclusiva para sus hijos: “Yo camino toda la ciudad con un costal al hombro que me permite recolectar el reciclaje en las diferentes zonas que recorro durante mi jornada diaria de trabajo. El dinero que recibo de las transferencias mis hijos lo esperan con ansias, saben que cuando llega vamos a poder comprar huevos, yogurt y todo lo que a ellos les gusta”¨.
De acuerdo con la Secretaria de Integración Social se busca la formación del capital humano en un ejercicio de corresponsabilidad, inspirando en el empoderamiento de las mujeres cabeza de hogar. Por tal razón, esta modalidad incluye además un completo seguimiento a las participantes, a quienes se les proporcionan herramientas para lograr en ellas estilos de vida saludable y una vigilancia nutricional a su familia,
Nueva estrategia de entrega para las personas que recibían los bonos canjeables
Las mujeres cabeza de hogar beneficiadas por esta nueva modalidad son las mismas que venían recibiendo los bonos canjeables por alimentos. De los bonos Canjeables tipo B del proyecto, 7.745 se identificaron como hogares de jefatura femenina. De allí se priorizaron aquellos que tuvieran madres gestantes o lactantes y hogares víctimas del conflicto armado, y los hogares con inseguridad alimentaria moderada y severa, según la encuesta de la Escala Latinoamericana y Caribeña de Seguridad Alimentaria, ELCSA, aplicada para el ingreso a bonos.
Con estas transferencias de $200.000 mensuales se da paso a una atención más específica a las mujeres cabeza de hogar.
En desarrollo del seguimiento institucional a esta estrategia, la entidad estableció que las madres cabeza de hogar invierten los recursos en alimentos, en el pago de los servicios públicos, en salud para ellas y para sus hijos e incluso para cancelar el arriendo.
