Administración y Policía anuncian desarme voluntario en otras localidades de Bogotá

El secretario Distrital de Gobierno, Hugo Ernesto Zárrate, asistió a la jornada de desarme que se llevó a cabo en la localidad de Bosa. Según el funcionario, desde el primer día de la Administración de la Bogotá Humana se comprometió a prohibir el porte ilegal de armas. Una política que he resultado ser muy positiva para la ciudad ya que ha permitido reducir las muertes de 22.4% a 16.7% muertes violentas por cada cien mil habitantes, convirtiendo a Bogotá en la tercera ciudad menos violenta de todo el país.

“Esta es la política del desarme, donde la gente de manera voluntaria ha entregado armas de varios calibres y munición en cantidad ratificando que prefieren la vida y no la muerte. Esto es muy importante para la seguridad y la convivencia de la ciudad”, señaló Zárrate.

Hasta el medio día el resultado de la jornada de desarme voluntario era de: 17 escopetas, 10 revólveres, 8 tamperos (armas hechizas parecidas a un fusil), 5 trabucos, 3 lapiceros, 7 pistolas, 1 rifle, 12 granadas, 2 proveedores y 2.700 municiones entregadas a las autoridades.

El directivo dijo además que de acuerdo con el Plan de Seguridad que desarrolla la Secretaría Distrital de Gobierno en 19 UPZ de Bogotá, se entregaron 5 motocicletas para tres zonas críticas que producen la mayor conflictividad en esta localidad: Bosa Occidental, Bosa Central y el Porvenir, para lograr mayor eficacia y operatividad de la Policía.

Entre tanto, el subcomandante de la Policía de Bogotá, Juan Carlos Vargas, señaló que este plan desarme que se hizo en esta zona de la ciudad, se hará en 4 localidades más: Ciudad Bolívar, Suba, Kennedy y San Cristóbal. “Quien tenga un arma de fuego a desarmarse, y a acudir a la legalidad para superar los conflictos”, argumentó.

La alcaldesa de Bosa, Diana Caderón Robles, finalmente, añadió que el incentivo que se dio en esta jornada fue mejorar la seguridad y dar bonos de almacenes de cadena para cambiarlos por alimentos de acuerdo con el tipo de arma entregada. “Cada arma que se logre sacar de circulación, representa muchas vidas que se salvan”, argumentó.