En lo que va corrido de la presente administración, 109 personas han sido detenidas por arrojar escombros, residuos de construcción y demolición al río Bogotá, humedales, quebradas y canales.
Estas acciones fueron posibles gracias al trabajo conjunto que vienen adelantando la Secretaría de Ambiente y la Policía Ambiental.
Así mismo, 21 establecimientos comerciales y vertimientos de entidades educativas tuvieron que ser selladas temporalmente por contaminación a las fuentes de agua de la ciudad.
En cuanto a las curtiembres, señaladas de ser las principales contaminadoras del río Bogotá, 14 de ellas han sido selladas y sancionadas por verter aguas con químicos al río Tunjuelo.
Vamos a triplicar los controles a las industrias que contaminen el río Bogotá, anuncia @EnriquePenalosa#DíaHistóricoRíoBogotápic.twitter.com/GkaMf1364W
— Alcaldía de Bogotá (@Bogota) 2 de octubre de 2017
Al mismo tiempo se han impuesto seis medidas preventivas a curtiembres que operan en el sector de San Benito, luego de cuatro operativos realizados por la Secretaría de Ambiente.
También se sellaron los vertimientos de agua de cuatro restaurantes del centro comercial Plaza Imperial por contaminar los humedales Juan Amarillo y La Conejera.
Posteriormente tuvieron que ser cerrados los vertimientos de agua con sangre y vísceras que venían haciendo tres frigoríficos del sector de Guadalupe. Así como el de dos establecimientos veterinarios que igualmente estaban contaminando la red de acueducto y alcantarillado de la ciudad.
Como parte de todo este proceso de vigilancia y control se han realizado más de 700 visitas de seguimiento a los 15 humedales de Bogotá, de los cuales se han extraído 9.800 toneladas de residuos.
Con todas estas acciones la alcaldía de Enrique Peñalosa trabaja día a día por la protección y la recuperación de estas importantes fuentes hídricas para todos los bogotanos.