Durante sus exploraciones de campo en Bogotá y Cundinamarca, científicos del Jardín Botánico hallaron tres especies de orquídeas que están clasificadas como amenazadas o en peligro de extinción.
Se trata de las especies: Odontoglossumgloriosum (Vulnerable CITES Apéndice II), Masdevallia caudata (en peligro) y Lepanthes stupenda (CITES Apéndice II), orquídeas que son esenciales para el funcionamiento de los ecosistemas de alta montaña y que además se han identificado como plantas con potencial de uso ornamental.
En cumplimiento de su misión de investigar y conservar la flora andina, los científicos del Jardín Botánico ingresaron las orquídeas al banco de germoplasma in vitro, para hacer las labores de identificación, investigación, conservación y propagación de estas valiosas especies.
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Así es el proceso en el laboratorio
Una vez las orquídeas ingresan al laboratorio del Jardín Botánico, los científicos almacenan las semillas en cápsulas o estructuras especializadas para hacer ensayos controlados in vitro, y evaluar métodos de desinfección y de cultivo que faciliten la germinación.
De este proceso depende que las germinaciones obtengan los nutrientes y características óptimas para su buen desarrollo y propagación o multiplicación.
La germinación de estas especies de orquídeas puede ser lenta debido a las características morfológicas y fisiológicas de sus semillas.
Sin embargo, a partir de la experiencia del Jardín Botánico para implementar protocolos de propagación de orquídeas, los especialistas obtienen masas celulares denominadas protocormos, los cuales permiten el desarrollo completo de las plantas.
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Las plantas obtenidas con esta técnica se les denomina vitroplantas, e ingresan de inmediato a ser parte de la propiedad y de la colección de plantas vivas del Jardín Botánico de Bogotá.
En esta misma línea de investigación, la entidad ha implementado técnicas de conservación de tejidos de plantas a temperaturas extremadamente bajas que se conocen como crioconservación.
Los protocormos son guardados en cápsulas artificiales de consistencia gelatinosa antes de ser expuestos a baja temperatura.
Nuevas especies que enriquecen el herbario del Jardín Botánico
Además del reconocimiento de estas tres especies de orquídeas, cuya importancia radica en que son amenazadas y es necesario evitar su extinción, también se recolectaron muestras botánicas que enriquecen las colecciones de plantas vivas del herbario del Jardín Botánico.
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El objetivo de ingresar estas especies al laboratorio in vitro y al herbario, consiste en salvaguardar y multiplicar a las orquídeas en condiciones de laboratorio, como estrategia de conservación fuera de su hábitat natural.
Estas actividades hacen parte de la gestión y conocimiento científico actual, que propone rutas viables para la conservación y el uso sostenible de la flora de Bogotá y la región.